viernes, 23 de septiembre de 2016

XXII





Observar la Verdad es vivir algo
objetivo, lo que no hay que confundir
con la opinión, tal acto es acudir
al hecho subjetivo; por ello dibulgo
mi ocupación con la Verdad, donde cuelgo
mi libre disposición para discutir,
el respeto de la minoría por rendir
pulsos”, sin más razón que “endilgo”
mi yo a “todo dios”, por ser yo quien espulgo
la verdad de mi razón, sin más reflexión
que “la razón de la fuerza”, como valor
de toda acción y gestión, cual hidalgo
de permanente ocupación en mi razón,
que tomo e impongo en acto unicolor.


© Jcb

miércoles, 14 de septiembre de 2016

Vivir y Sentir la Vida



A Rafael Cobos Jimenez

Vivir es Sentir, principios básicos
de toda vida humana, no podrás
vivir si tu vida carece de vivencia,
no podrás vivir si en tu vida,
no sientes la vida misma,
no interiorizas los sentimientos,
razones y reflexiones cuando ellos
se amalgaman en una suerte de
estadios por donde necesariamente,
con o sin licencia, la vida camina.
El camino de tu vida, es algo que debes vivenciar,
pues es posible que no siempre sea de tu elección,
aquella vereda, por la que todos, de una u otra forma,
antes o después debemos pasar;
aún así, debes saber manejar las riendas de tu vida,
la debes sentir y vivir, es tu mismo ser.
Tu vida es una y única, una vida que nadie podrá vivir por tí.
Vivir tu propia vida, es expresar tus razones,
tus emociones, positivas o negativas,
aquellas que la misma vida te produce.
Para vivir la vida hay que vivenciarla,
lo que no es otra cosa que esa gran amalgama de emociones,
sentimientos y razones por las que vivencias tu propia vida,
con la asunción de los compromisos y afectos
que la misma nos proporciona y exige.
Si importante es vivir la vida,
no lo es menos atender los caminos
que la vivencia de ella nos proporciona.
Además de ello, debemos atender la mutaciones
que nuestra vida sufrirá con el paso de los días;
por tal debemos vivienciar los cambios y giros
de nuestra vida, observar sus razones y ser coherentes,
con los cambios y evoluciones naturales de nuestro ser;
eso sí, sin faltar a la unidad de nuestra personalidad,
la que sin duda también evoluciona con el paso de los días.
Nuestro compromiso de vida,
tanto individual como colectiva,
es nuestro yo, que es, el que se manifiesta en cada instante,
donde jamás debe faltar la verdad, la razón y la reflexión,
sobre todo, nuestro compromiso con nuestro hacer y acontecer;
donde el amor y los afectos,
sean el eje central de nuestra conducta.
Así, hay razones de sangre y razones de afectos electivos.
Por tal, la vida no es un hecho aislado,
es vivencia individual y colectiva,
es frio y calor, vigilia y sueño,
luz y oscuridad, pasión y apatía,
horizontalidad y verticalidad,
día y noche, frío y calor, agua y nieve,
amor y desamor, vida y muerte.
Muchas son la razones para vivir la vida,
pero la razón última es la muerte,
quien justifica la vida y su vivencia, el amor, la pasión, la razón,
la verdad, la belleza, la humanidad...
No hay muerte donde no hay vida.


© Jcb

lunes, 12 de septiembre de 2016

Oleajes de la Vida





La vida, un mar en constante oleaje,
donde quedamos sujetos a los acopios
de sus vientos alisios y contralisios,
a merced de fuerzas naturales, cuaje
que es preciso superar con cabotaje
superior, cual asidero de alojos,
donde la vida sea vivida con ojos
en la rosa de los vientos sin chantaje.
Toda vida tiene sus marejadas,
las que sólo mejoran con las añadas,
gracia a las tierras y fronteras, que
los años hacen dar por superadas,
donde los vientos ponen sus soñadas
rosas de pasión con visión de trueque.



© Jcb

viernes, 9 de septiembre de 2016

Pensando





Pienso que pensando me paso el tiempo
alarmado, tal que si sumo el tiempo
que empleo pensando, no tengo tiempo
para otra acción, pues ocupando el tiempo
me hallo; así es el tiempo que acampo
en el espacio y tiempo, que me agolpo
preocupado; con débiles fuerzas arpo
improductivamente todo el arropo.
Es todo arquetipo de tiempo guapo,
donde reflexión de tiempo guarapo
sea la vida toda razón de cupo,
por cuidado extendido en campo
de acción, cuyo tesón sea cepo
de pasión por la reflexión en tiempo.


© Jcb


lunes, 5 de septiembre de 2016

Muéstrate





Muéstrate, presenta tus credenciales,
los atributos que adornan tu ser,
la razón y voluntad de todo tu ser,
aquello que marca tus diferenciales,
lo que hace de ti un ser con laureles
únicos, cuyas conductas hacen crecer
la coherencia del ser tras abstraer
la unidad de acción en emociones,
cuyas reflexiones son abonables
en todo tiempo y lugar, por doquier
dan frutos que conductas hacen crecer,
incluso en campos baldíos, los legones
que debes usar, son la razón, el querer
y abastecer toda reflexión con pasión.


© Jcb

lunes, 29 de agosto de 2016

Vuelo y Libertad





Para cualquier animal de pluma, el
vuelo es su hábitat natural, para
el ser humano, el vuelo es su cámara
interior, su razón de ser, su cañamiel
por la que actúa y mueve su bajel;
libertad”, hecho y circunstancia clara
por la que con empeño abarcará
toda licencia de gobierno; arancel
de vida, cuyo albedrío es principio
y pedestal de toda actuación que
la razón y capacidad demandan.
Sólo el juicio y tesón, son gremio
para que la persona su vuelo alce,
donde la vida es orden de libre afán.


© Jcb


miércoles, 24 de agosto de 2016

XX






Las huellas de tus ancestros hablan de
ti, de tu herencia material e incorpórea,
si ella queda en olvido, desmadejada,
perderas la senda que te antecede.
La orfandad y el extravío al aire
quedan, sujetos al vieto y la marea
de todos los mares y tierras; capea
circunstancias y naturaleza, tu alarde
de conocimiento y razón, son esencia
de tu ser, senda del gobierno de tu yo,
cual asidero de tu conocimiento
y dominio de todo cuanto te rodea.
Lo que antecede y precede, son coto
y medida de tu ser, marca de tu yo.


© Jcb