miércoles, 10 de julio de 2013

Tinajeros




A los artesanos de Villarrobledo


Hombres de acero, robles cual
activos noche y día,
no importa el sol o el fuego, su
calor claustro de abadía.
Es belleza y labor que
manos artesanas lía.
Grandes piezas cargadas de
ser, moldeadas tañería
con manos de labor, sudor
razón, oración baldía
que atendía previa dación,
de la tierra en cofradía.
De sus entrañas manaba
materia prima, que acopia
el hombre de acero cual por
ser artesano atendía,
todos los oficios que su
hacer en sí requería.

Alfareros de la tierra,
su corazón de vigía
domina sus entrañas, por
ganar de ella la energía,
cual pozo quita y da la
vida. Por él la materia
toma la luz; transformación
requiere, que abarcaría
toda la gama cual acción
artesa, por sedería,
con manos primas expertas,
ductilidad adquiría.
Tras ello el molde no tiene
más lugar que por enjundia
natural, de la ciencia del
hacer, que artesano abría
de domeñar en gran forja
de fuerte espacio, materia
que vino cocerá por su
natural sabiduría.


© Jcb, 05/2013