domingo, 20 de noviembre de 2011

Equilibrio






Orden, respeto y observancia
de la norma dada. Por el voto,
la autoridad designada.
Ningún ciudadano es ni puede ser,
per se, enemigo de nada ni de nadie.

Salvo que se acredite lo contrario,
de natural todo el mundo está dotado
de los mínimos necesarios, para
la comprensión y aplicación de la cosas
de los hombres: la verdad y la justicia.

Nadie es titular de la verdad,
podrá poseer su verdad,
pero nunca la Verdad.
Por ello respeta en todo momento
la opinión ajena, jamás olvides
que donde empieza tu libertad,
tiene termino la de tu contertulio,
allí donde inicia la libertad de tu vecino,
tiene su final la tuya.

Ponderación es tu medida de acción.
No seas juez ajeno sin justa valoración.
Practica el equilibrio en todo punto y momento.
La rosa de los vientos tiene infinitos puntos
que debes visitar y, en ellos reflexionar
para tu recto caminar.