Allí
donde quiera que habites,
se
libre y vive en libertad,
has
nacido para ello.
Ahora
bien, en defensa de tu vida,
sé
impasible a las contingencias,
con
firmeza, enfréntate a todas las desavenencias
que
se opongan a tu vida en libertad.
Toda
vez que vivirás en comunidad,
aunque
las raíces sean diferentes,
no
olvides que necesitarás prestaciones
de
tus convecinos, por ello acepta las diferencias
y
vive y paz y armonía con todos ellos.
Al
final las diferencias son matices.
No
obstante lucha por tu propia libertad y vive con ella.
©
Jcb, 07/2015