viernes, 26 de julio de 2019

0013





Procura que tus palabras y tus actos
sean hijos de tu inteligencia,
evita las contradicciones,
bucea en tu interior y medita la esencia y razón tu yo,
tu personal historia debe ser un espejo
para la perfección de cada día;
lo sublime sólo se logra
con una gran suma de rectificaciones.
Que nada te impida subsanar tu interior,
ello dará fe de tu inteligencia.
No importa lo que los otros vean en ti,
lo que suma es lo que tu vidriera diga de ti.
Sólo si obras con prudencia y sabiduría,
los hierros serán palanca de perfección.
El bien hacer es una sana aspiración,
ser hijo de la inteligencia y la bondad,
es caminar en la vida por la estrecha
vía del servicio a la verdad y la perfección.

© Jcb