domingo, 28 de abril de 2019

0017





Mi atavío es ligero, “mi equipaje”
es liviano, tal cual la vida en paz,
cuyo precio regularmente hay que pagar.
Aún así, su coste, cualquiera que sea,
siempre será más saludable la calma,
cuya armonía, tarde o temprano,
producirá frutos imperecederos.

© Jcb