sábado, 23 de diciembre de 2017

Derechos Humanos




I

Derechos humanos, evocados por
muchos, mal tratados por todos, leyes
que no se cumplen, razones de reyes
que fluyen al olvido con estupor.

Sin diligencia ni razón el mentor
crea injusticias y maldad con sus bueyes,
sus principios: su yo, que no desoyes,
pues naufragarías por su contravalor.

No importan las distancias ni las estancias
si con bienes mercantiles hay que tratar,
el beneficio tiene su propio interés.

Medir para sumar sus carrocerías,
cuyo valor debe verse incrementar,
no incumben los caídos ni sus habares.


II

Me duele el ánima por los derechos
humanos, toda ausencia de civismo,
abre en la humanidad un gran abismo,
donde el vocerío son sus contrahechos.

Todo grito es destello de desechos,
ya que su incandescencia es amorfismo,
carente de fuego por costumbrismo,
cuyo fulgor son hojas de helechos.

Naufraga la humanidad por códigos
sin razón, injusticias en cordeta
que mantiene a las gentes con corneta.

Se conserva la memoria en domingos,
y las grietas del recuerdo es calceta
donde el silencio de la calle es boleta.

© Jcb