viernes, 30 de junio de 2017

XXXVIII





El hecho de que a veces aparezcas
como intemperante, ello no debe
afear ni lisiar la guía que pruebe,
la conducta personal que acercas
a la verdad de tu ser, acurrucas
el tiempo y espacio que embebe
vida ordinaria y desapruebe
toda la intemperancia que no buscas.
La más bella conducta de vida, es
templanza quien te conduce con razón
y prudencia la reflexión personal
más audaz, donde con armonía mandes
en la inteligencia que toma acción
en tu vida más vivaz y cardinal.

© Jcb