domingo, 6 de octubre de 2013

Zángano








Como zángano que es, crea la mentira
forma parte de holgazanería,
que ni noche ni día aboliría
su realidad social, jamás abrirá.

En todo instante existencia asumirá.
Su panal, él por nada abatiría,
con el fin de ganar, no acodaría
espacio a recrear, en el que morirá.

Todo le es indiferente con tal de
ganar indolencia, que es su realidad,
observará y haciendo el haragán

partida ganará, más aún lenguaraz,
la gente le aplaudirá, procacidad
tomará con luces que siempre ciegan.


© Jcb, 10/2013




sábado, 5 de octubre de 2013

Tolerancia












Tolerancia eres tu, cuando escuchas con
atención, elaboras las palabras
de tu interlocutor y abanderas
comprensión, por juicio, cual desde el balcón

de su reflexión, por amor y pasión
tomas el crecimiento, en que aparceras
plural cordura, con lo que abolirás
tu singular yo, para ganar lección.

Tolerancia es esa flor que ilumina
tu razón con pasión, cuando sensatez
es mano tendida por indagación.

Tolerancia, aquel estado que atina
y apasiona la vida a su vejez,
con prudencia ata toda vinculación.





© Jcb
 
 

viernes, 27 de septiembre de 2013

Besos a la vida






I

Ojos de virtud, por nobleza de amor,
por derecho, el imperio de la razón,
canto del yo, justa belleza, pasión,
color por medida al mar, sal de fervor.

De los dioses, por amor flor interior,
socrática introspección, por galardón
interior, cumbre vital de exaltación,
ascensión por sola soledad de amor.

Fuego crepuscular, vida por soñar,
vida vivida, juventud amada,
lirios de color, mañana, tierra, mar.

Pardo terrón con sus rosales en flor,
trigales y viñedos virtudes son,
esfuerzo, agua y sol, frutos del amor.


II

La comunicación del ser, la dación
en oración cual comunión de los yo.
Las personas sienten y con su arroyo
de emoción, se expresan con aceptación.

Todo reconocimiento, es admisión,
siendo el beso adjetivación, arguyo
del yo, el tu y el nos sin capisayo,
tras el beso por acción de aclamación,

la vida de los besados, puede dar
nueva tonalidad, para en si gozar
de mutuo acuerdo por confesar verdad,

incluso de vida común por fraguar,
el beso como tal es armonizar,
dación, declaración del yo en alindad


© Jcb, 07/2013




martes, 17 de septiembre de 2013

De la utopía a la excelencia






Utopía, proyecto con apariencia irrealizable.
Excelencia, calidad, bondad, aprecio o estimación superior.

Desde la Utopía, siempre tendrás una meta que alcanzar.
Por la Excelencia, en todo momento debes tener algo que perfeccionar.


Tu que eres ciudadan@ de un mundo que deseas sea habitable:
que con tesón buscas la belleza;
que conciencia y nobleza no te faltan;
que no careces de integridad ni sueños;
que con pasión luchas por la superación personal y social de todos cuantos te rodean;
que cualquiera que sea tu edad y condición social, jamás pierdes la esperanza de un mundo solidario y ejemplar;
que por naturaleza te revelas contra las injusticias y los atropellos, cuales quiera que ellos sean, con independencia de sus orígenes;
que no te falta entrega ni idealismo, por ende extiendes tu amor, allí donde te haces presente;
que gozas de gran predisposición y capacidad creadora;
que por mor de tus capacidades, eres meritori@ de la autogestión;
que nada te impide levantar la vista y alzar, de inmediato, tu espíritu humano a las más altas cotas, cualquiera que sean los elementos que se te enfrentan;
que eres frágil al silencio y a la flor marchita;
que a cada cual le das conforme a sus méritos y sus necesidades;
que en todo momento buscas la dicha y la plenitud del “alma” de la persona;
que jamás renuncias a las más altas magistraturas de tu espíritu;
que como buscador/a de la justicia, ésta no existe cuando hay carencia de ética;
que como virtuos@, en ti no hay acción en la que la honorabilidad esté ausente.
Querid@ herman@, ciudadan@, del mundo, ¿por qué has abandonado la Utopía?, ¿por qué razón no buscas la Excelencia en todos tus actos?.
Ello no depende de credos ni de ninguna otra creación humana, exclusivamente están sujetas a tu razón y voluntad.


© Jcb, 07/2013





lunes, 16 de septiembre de 2013

Pudor





Pudor, aquel estado de tu razón,
aquel recato que limita tu acción,
modestia que puede romper cohesión,
medida que limita tu corazón.

Tu crecimiento, madurez y sazón,
dependen de ti y la programación,
que concedas a tu ser y su gestión,
la vida tiene valor y sinrazón.

Todo es cuestión de valoración, amor
es una buena ley de cálculo,
juicio y apreciación, todo pende

del esfuerzo que prestes y el primor,
con audacia, por ser, sin oráculo
que medie, que en sí, tu yo sólo entiende.


© Jcb, 09/2013



domingo, 15 de septiembre de 2013

Lontananza






Allí, en la lontananza, donde convergen las fuerzas naturales

es una línea recta, ficción de mi ser;

allí, donde la soledad es murmullo del silencio;

allí, donde la vida es existencia natural;

allí, donde el firmamento se une al mar;

allí, donde la soledad otorga su grandioso amanecer;

allí, donde el ciclo vital del día, nos regala el más bello anochecer;

allí, donde el día no otorga la luz más vivificadora;

allí, donde la noche adquiere su inmensidad;

allí, donde se personan mis ojos gozando en libertad;

allí, donde mi razón y mi reflexión, son voluntad;

allí, donde todo es paz, silencio y soledad;

allí, donde el día y la noche son una misma unidad de acción vital;

allí, donde cada cual tiene su color, su vida y singularidad;

allí, donde yo quiero ir con libre albedrío para anidar;

allí, donde se encuentra el vientre de la humanidad.

Allí, contigo quiero ir, si tu quieres venir.

Allí, conversaremos con los dioses de la historia de la humanidad;

allí, donde la ciencia y el saber, es lo apriorístico de nuestro ser.

Allí, conversaremos con Homero, Sócrates, Platón o Aristóteles

y otros tanto sabios que en el mundo son.

Ellos, unos y otros, son la oración y la razón, la vida y el amor;
reflejos del tu y el yo.

Ellos nos enseñarán la belleza del amor, la pasión de la vida,
el color de la noche y el sol.

Ellos son razón y reflexión, gestión del yo y el nos.



© Jcb, 13/09/13



sábado, 14 de septiembre de 2013

"Cuando los árboles no dejan ver el bosque"







Nos ciegan las cosas más livianas, nos
aferramos al latido un instante,
como único elemento calmante,
cual por primario nos priva de atinos.

Por elemental, nos impide asirnos,
alzar la vista y arbolar fuerte,
cual espíritu humano, debate
de superior enjundia por blandirnos.

La dicha por plenitud de espíritu
superior, que por su elevando fondo,
extiende su magistratura, dato

superior a lo incipiente. Ímpetu
de razón, cual amante que abnegando,
se encarama al amor por pura dación.



© Jcb, 07/2013