Alabastro

Es su traslúcido ser lo que llama

al canciller formalizar la belleza

de su ser, prestancia de alabanza

por su bizarría, afinidad que ahorma

toda acción en libertad de quien ama,

por ilusión el hermoso hacer; baza

del artesano que blande su maza

con gallardía, presto para la firma.

Blanco ser, cuyo existir es acento

de belleza y perfección por holganza,

donde hermosura acentúa coraza.

Libre ensoñación en puro acto

creador, cual fábrica de gobernanza,

cuya firma es elegancia que abraza.

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Aquellos tiempos

Aquello que fue, es lo que no volverá

a ser; por tal ya forma parte de la

historia; es a su vez la raíz, la basa

y fuste de cuanto somos; cimera

superior de voluntad y razón, acera

por donde camina la verdad; gozarla

es la dicha más humana; acuarela

donde se presenta la vida certera.

El tiempo pasado es la luminaria

de hoy, marca el camino por donde

se conducen las gentes observadoras.

Quienes observan, meditan y hacen honor

a sus tiempos pretéritos, son garantía

de la llama recibida, base de su futuro.

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Sabiduría de viejos

Sólo la experiencia habla con verdad,

entiende la valentía y la soledad;

por sus azotes los fragmentos de unidad,

son alientos de vida en puridad.

Huellas de existencias, humanidad

trabada por transitada realidad

que busca el empuje, cuya actividad

son noches de insomnio viviendo ajenidad.

Sabidurías no deseadas, caridad

de vientos preñados de historia, unidad

de silencios, languidez que es probidad.

Azotada estructura, nocturnidad

calmada en espera de bella unicidad,

cual lluvia de mar con su vitalidad.

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Integridad

Integridad es cumplir tus obligaciones

en todo tiempo y lugar, sin imposición,

de mutuo propio, por ser la mejor opción

la obligación del deber sin alardes.

Allí, donde lo cívico son deberes

personales, cumplimientos de blasón

que exige la vida como integración

en comunidad con derechos y deberes.

La integración social, demanda tributo

individual y grupal, donde fabulación

es naufragio personal y comunal.

Vivir en sociedad, exige integridad, culto

a la vida social, donde la razón

de comunidad prima sobre lo individual.

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El tiempo habla

Sólo el tiempo habla y entiende

la verdad, la puridad de los vientos,

el honor de lo indómito, fragmentos

de vida, cuyos vientos uno esconde.

El viento que a los amantes entiende,

habla por medio de cuantos silencios

ellos crean; austeros vacíos de versos,

embrujos que su perfección simule;

visillos, fragmentos de vida que guardan

desnudos su razón, cual embriagadas

noches de bohemias henchidas de brisa;

ausencia de sol por verbos que bogan,

en el desierto individual de las palabras

primas, las que mutan su desnudez leñosa.

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Gente tóxica

A Encarna Sanchís Blat

Si buscas el bien estar, no admitas

gente tóxica en tu vida, cualquiera

que sea tu estado emocional, será

necesario que alejes las apuestas;

tu vida física/psíquica son ballestas

que requieren esmero cual acera

por donde camina toda bandera

de la verdad y el sosiego; son testas

de equilibrio y justicia; pasión

por la belleza, donde la paz anda

en pos de la armonía que centellea

toda acción de concordia y razón;

tal cual la tribu que te cobija y ordena

las basas y contrafuertes de tu almena.

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XXV

El nacimiento te otorga el permanente

instinto de supervivencia, es la propia

naturaleza; de ti depende la vida

y que la indefinida “creación” se supere.

Desde aquel “feliz” y doloroso instante,

tu existencia está expuesta a resistencia;

los permanentes cambios de toda ciencia,

te darán maduración con valor creciente.

Tu auto-transformación es vivo hecho

que conforma tu única unidad, acto

de mutación de tu interior en soledad.

Es tu yo en retiro que por derecho

genera tu individual crecimiento,

fortaleza y confianza en fraternidad.

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