Pudor, aquel estado de tu razón,
aquel recato que limita tu acción,
modestia que puede romper cohesión,
medida que limita tu corazón.
Tu crecimiento, madurez y sazón,
dependen de ti y la programación,
que concedas a tu ser y su gestión,
la vida tiene valor y sinrazón.
Todo es cuestión de valoración, amor
es una buena ley de cálculo,
juicio y apreciación, todo pende
del esfuerzo que prestes y el primor,
con audacia, por ser, sin oráculo
que medie, que en sí, tu yo sólo entiende.
© Jcb, 09/2013