Ceder tu aleteo es atar tus alas,
tanto como hipotecar tus licencias,
preñar tu vida es ir merced de agencias,
ata las bases y gana corralas.
Mira a la mariposa en sus escalas,
con su vuelo dicta y crea las ciencias
de su bello vivir sin más carencias,
donde libertad es acto de igualas.
Ceder autonomía en lo privado,
es enajenar el yo y su franqueza,
negando con ello a los ruiseñores.
La conciencia de vida es acto amado,
saber ser y estar, la mayor riqueza
del libre albedrío, canto de autores.
© Jcb