Mi gemido no consigue expresar
la pena que experimenta mi cuerpo
y mi razón, mi silencio anticuerpo,
congoja y sinrazón de mi pesar.
Mi gemido es duelo sin condensar,
fatiga que alimenta y nunca extirpo,
mal que no achica, sable que no usurpo,
jaula que zahiere sin procesar.
Lamento el desgobierno y su maldad,
crímenes que alimentan el odiar
de unos a otros, fuegos sin apagar.
Heridas sin elección ni anidad,
necios en manada sin acequiar,
peleles enjaulados sin dragar.
© Jcb