Vive en mí la razón que me acompaña,
vivo con la historia de los que fueron,
los que dejaron de serlo y alcanzaron
vida habitando su vivir con maña.
Vivo el vivir e hipoteco mi hazaña,
donde arrastro la vida que ayer dieron
los que de balde la suya entregaron
y alzaron con los suyos su cabaña.
Vivo y asumo la de los que sumaron
durezas y esfuerzos hoy insoportables,
por una vida ruda sin remisión.
Jamás izaron los brazos, llevaron
la cabeza bien alta, la rudeza
que cargaron, hoy es su eterna dignidad.
© Jcb