El puro insecto electo sin
justa elección aguza el
aguijón viviendo del biberón,
sólo se ocupa de bogar y
montarse su bohío.
Para evitar bochornoso escalofrío,
pone bocina a “de lo mío qué hay”,
más aún si tiene la condición
de bocazas o vocero, bodoque
está servido, en cuyo caso
la acción de bogavante
es bola con boina,
que tiene bocón por bocina.
Situándose en el boliche toma
bolada como conducto habitual,
por ello, para mandarlo al corral,
boicot de la ciudadanía
es la reparadora y mejor acción.