Nunca más

Cuando deje de haber esclavos y dueños,

cuando el pueblo se rebele al instante,

contra el inacabable atrevimiento de aquellos

a quienes haya elegido;

entonces y sólo entonces,

los que acreditado tienen de ser “burrócratas”, “golfos”,

no tendrán más remedio que pararse y decir:

“pies, para qué os quiero” y,

al momento tomar las de villadiego,

para nunca más volver y,

con ello perderse en la noche de los tiempos,

como prueba de malos e incívicos ciudadanos.

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Emociones

Emociones, son razones del corazón,

que saltan todas las vallas de la razón,

son voluntades que se imponen al son

de la emoción, dato hecho u oración.

Todo queda circunscrito a la canción

del yo primario e individual, arcón

del ego más germinal, por actuación

voluptuosidad jovial por acreditación.

No son las emociones del estado

más senatorial, donde la fogosidad

es frenada por el orden y la reflexión.

Todas las edades tienen su gestión,

por ende toda su huella, pero cuando

pintan canas, la actuación es más razón

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Inmoralidad

Resueltamente y con presteza,

avanzan en la confusión,

quienes administran el desorden, el lío y el enredo;

aunque se ofrecieron para todo lo contrario y,

por ello fueron designados.

Ahora bien, su inmoralidad, su corrupción

y su hacer normas al dictado de terceros,

contra los intereses de la mayoría;

les hacen acreedores de los calificativos

que con “paciencia” y “honor” se han ganado:

descollados tiranos, groseros, corruptos,
golfos por el real de vellón.

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Amistad.

A Agustín Ortíz Herreros

y, en su persona, a otr@s much@s

La amistad es el don de la verdad,

el arco iris, el amor de la humanidad,

es pasión hecha razón, dicha de unidad,

son mientes que nos generan hermandad.

Hechos de vidrios cristalinos cuya calidad,

unen a la gentes en ser por amistad,

donde los lazos son unidad de sociedad,

son afectos, sentimientos de afinidad.

Son razones de filantropía, gallardía

del ser, respeto y armonía sin miopía,

gentes que florecen en el ser y estar.

Cuadraturas de circulo con valentía,

mecanismo de acción sin bigardía,

donde el sol no tiene día ni despertar.

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Hoja muerta

Satisfecha la hoja,

que una vez el deber cumplido,

cae muerta al suelo,

quien termina en espiral,

dándose, en forma tal, a la tierra germinadora,

que termina siendo un absoluta desconocida.

Tal es así, que muere para generar vida.

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Rapaces

Vuelan los rapaces escrutando la tierra,

nada dejan de observar,

está en juego su propia vida,

su vuelo está sujeto a su libertad y supervivencia.

Su amor, en todo tiempo y lugar,

es impaciente y eterno.

Son señas de identidad de juventud.

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Ironía.

Mi tristeza me lleva a la ironía,

es mi defensa para evitar llorar,

es la sonrisa de la dolencia,

todo por la pena de la gran mediocridad

que nos arropa en todas las entretelas,

impidiendo poder escapar, del gran fangal.

Es el gran sollozo, por aquellos que pudiendo,

no se paran a pensar,

se dejan llevar y no construyen

otra cosa que mediocridad.

Todo por la voluptuosidad,

lo fácil y dejar el agua pasar.

La carencia de ciudadanía,

es la gran enfermedad de la vigente sociedad.

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