La luz de los noventa

A Palmira Val Serrate

La Luz de los Noventa, no llega a los ochenta,

menos aún, con más de media recua suelta,

quien hoy, más que ayer,

procuran cobijo, emoción y calor,

que decora una vida dedicada a la razón,

quien sostiene a la tribu en unidad de acción,

lo que embellece el monte vestido de plata color.

© Jcb

La tribu y sus infantes

Ante los “nanos”, toda la “tribu” tiene

obligación, es empeño de contribución

por compromiso social sin quebrantación,

a todos cumple albergar al peque.

Junto a su progreso y salud, cumple

la educación y en las aulas formación,

todo es una unidad por su graduación

social que es lo primero que conviene.

Es la familia y la sociedad quien

con voluntad desvelo debe forzar,

para en sus pequeños crear afán.

Afición por la correcta labor, en

la criatura por inoculación gozar,

de ciencia y vida con humanidad.

© Jcb

Tu luz, tu razón

No importa la luz exterior, cuando

la oscuridad reside en tu interior,

con necesidad o sin ella,

la luz es obligación de tu razón

La luciérnaga que ilumina tu yo,

está sustentada por los pasos de tu ser,

tu reflexión es lo que acrecienta

el foco que ilumina tu caminar.

La razón, es el tiro de tu carro y de los que contigo van,

ellos penden de tu fuerza motriz,

no camines con “orejeras”, ellas limitan tu campo de visión.

© Jcb

Caminos de la Vida

A mis hijas Natalia y Elena

Muchos son los caminos de la vida

que a diario debes transitar, más no

por ello debes dejar el cuaderno,

él te hará soñar por acogida.

Son senderos de vida acudida,

ellos, en el vivir serán abono

de vivencia que aquello acunó.

No todo caminar es paz ganada.

La vida por acontecida pide

transito de esfuerzo y empeño

personal, que buscando ganes la paz.

Con arrojo vivenciar, que alcaide

de tu vida serás, en cuyo sueño

con vigilia, felicidad ganarás.

© Jcb

Caminos de amanecida

Los caminos de las amanecidas

son buscados en cada instante. Luces

que abren tiempos y sendas constantes,

espacios que no conocen fronteras.

Son extensiones por donde andan las

luces de la vida, senderos, cauces

donde habitan lo que son códices

de pasión y reflexión en almenas.

Superficies de los rumbos de cada cual,

donde lealtad es razón que goza

de libertad, encuentros de su pasión.

Trayectos de humana fraternidad,

donde las horas son aceros del ánima,

juicio de todo el día por acotación.

© Jcb

El precio de la Libertad

Tu libertad es tu razón, la causa de

tu acción, el precio que deberás pagar,

en muchos casos,

por la indiferencia de los más.

Nada te debe importar si tu bandera

es tu libertad y su razón, tu reflexión y

el ejercicio de tu libertad,

jamás te debe amilanar.

Esos infortunios pueden ser pasajeros,

no así tu libertad, ella es eterna,

la forja de tu grandeza.

La perseverancia y sus razones, son los

cimientos de tu vida, a su vez

contrafuertes de tu libertad.

Te encontrarás desprecios e intentos de

amilanamientos, no los temas,

tu fuerza es la firmeza de tu razón,

la grandeza, tu reflexión,

bondad en acción.

© Jcb

Dorado sueño

Dorado sueño,

canto de gorriones, violines

con voz de a dos.

Noche sonora,

dorados bizantinos

coro de voces.

Juego de luces,

brillantes hojas caen,

cielos apagados.

Espacios abiertos,

engalanados zócalos,

hojas cubren.

La luz no es tal,

es un espejismo,

no existe porosidad.

Los poros permiten

la luz, son pasos

de sutil grandeza.

Licencias sonoras

avivan el viento,

vibran los sones.

Aún en luz,

se hace la noche,

no brillan las estrellas.

Fuentes cantan,

ranas protegen,

los gorriones decoran.

© Jcb