Deseo que mis palabras puedan tener alas,
para que se alojen en tu razón y abrochando,
con pasión el músculo superior,
despierten los extremos de tu condición.
Así, juntando punta y remate de la condición humana
tomes partido por tu vital ser y estar,
atiendas con reflexión lo que dicte tu corazón,
sin dejar de pasar una sola ocasión de amor.
Que la belleza con vehemencia
mimen tu fibra suprema,
despierte los límites de tu condición y,
tomando partido, acaricien tu sublime naturaleza.
© Jcb