miércoles, 4 de septiembre de 2019

0017





Mi atavío es ligero, mi equipaje
es liviano, tal cual la vida en paz,
cuyo precio regularmente hay que pagar.
Aún así, su coste, cualquiera que el mismo sea,
siempre será más saludable la calma,
cuya armonía, tarde o temprano,
producirá frutos imperecederos.

© Jcb