I
Es la vida al despertar,
tras el bullicio, solaz demandará.
La edad pide paz,
un canto para soñar
en todo momento y lugar.
II
A tu algar me quise asir
mas no te pude seguir,
mi músculo no supo cantar
tu verde primaveral.
III
Otoño dorado, en ti, es para ti,
desde el verano crecí,
contigo en otoño resistí,
para ti, junto a ti, en invierno vivir.
IV
Dorado otoño que a mi vida llegó,
nunca le llamé, nunca le esperé,
en todo momento bello me fue,
siempre en silencio le ame.
Hoy con blanco manto superior, lo llevo yo.
V
No deja de causar dolor,
abandonar tu pariente anterior,
ella te faculta amplia y ancha vereda,
extenso camino te creó, músculo te otorgó.
La vida germinó en todo momento y color.
VI
Alfombras de dorado terciopelo
decoran suelos por lecho habitual,
la vida pasar, aviso del blanco invernal,
sucesión de la vida por generación.
VII
Pluriformas doradas tus bases adornan,
cuando tu ropaje cobija jilgueros entonan,
alegres proclaman plural diversidad.
VIII
Desnudos tus brazos quedan
por sucesión natural,
para todo volver a cambiar,
cuando la muerte llega
al ropaje universal.
IX
Pintadillos cantan la fiesta floral,
luciérnagas brillan en la oscura mar,
floresta alternancia de color,
obra de fragancias por personación.