Deseo que mis palabras puedan tener
alas, se alojen en tu razón, tomen
partido, te acaricien y te aclamen,
y, con verdad logren tu mejor sostener.
Precisas descansar, vivir y mantener
los rasgos de hombres justos que confirmen
racionalidad sin remisión, y armen
la nutrición de la verdad sin deponer.
Transitar por los caminos de la equidad,
exige alimentarse de la reflexión,
llevando en la mochila la prudencia.
Tales herramientas piden actividad
ética cierta, donde ganar conexión
de vida ciudadana en abundancia.
© Jcb