Los
aromas de la vida, son esos
caminos
y sus linderos, peldaños
cual
filtros de los valores humanos,
son
pilares y contrafuertes ciegos,
que
anejos a todos los abrigos
del
ser, son razones y equipamientos
de
la persona, cuyos aparejos
son
acopios de unidad y verdad, cantos
de
individualidad en libertad, lazos
de
disciplina con justos cobijos,
cuyo
sueño en silencio amamos.
Aromas
de uniformidad, excelsos
compromisos
por el amor, cimientos
de
los procesos construtivos del nos.
©
Jcb